photo of doctor patient consultation

La población hispana en los Estados Unidos se enfrenta en la actualidad a desigualdades en cuanto a los cuidados médicos, que tienen un grave efecto en la salud de esta comunidad. En varios ensayos clínicos se han comprobado que la discriminación (en este caso la discriminación a la población hispana) puede perjudicar el estado de salud de los pacientes y provocar una severa insatisfacción con respecto a la atención médica. 

En cuanto a la atención médica, podrías experimentar esa discriminación cuando un proveedor de cuidados médicos: 

  • No te toma en serio
  • Descarta los síntomas o preocupaciones de salud que puedas tener
  • Te ofrece un tratamiento según el tipo de seguro médico que tienes
  • No te brinda cuidado médico en tu idioma

Un círculo vicioso

El racismo estructural e institucional que existe en los sistemas médicos y sociales se ha generado por varias razones complejas. 

Por ejemplo, al inicio del siglo veinte, se realizaron experimentos médicos en personas de grupos marginados, sin su conocimiento o consentimiento. Por lo tanto, es evidente que:

  • Ciertos proveedores de atención médica todavía tienen prejuicios residuales hacia los pacientes que no son blancos. 
  • Varios pacientes hispanos y de raza negra todavía desconfían de los sistemas médicos.

Además, hay una larga historia de políticas discriminatorias en materia de vivienda y préstamos en los Estados Unidos que persisten hasta hoy día. Por ejemplo, aunque la segregación racial es legalmente prohibida en Estados Unidos, para muchas personas hispanas y personas de otros grupos marginados sigue siendo una realidad. 

Esta condición social trae consigo barreras de acceso a ciertos factores sociales:

  • Viviendas adecuadas
  • Trabajos con buenos salarios
  • Alimentos saludables
  • Recursos educativos
  • Un buen cuidado médico

Por lo tanto, los bajos ingresos, la falta de un buen seguro médico y otros factores sociales pueden contribuir a un estado de salud deficiente. Con el fin de romper esas barreras, la Organización Mundial de la Salud formó una comisión para abordar los determinantes sociales de la salud. 

¿Cuáles son los determinantes sociales de la salud?

Los determinantes sociales de la salud son las condiciones sociales, económicas y físicas del lugar donde una persona nace, crece, trabaja, vive y envejece. A pesar de que estos factores no aparentan tener nada que ver con la salud, varios ensayos clínicos han determinado que sí tienen un efecto significativo en la calidad de vida y en el estado de la salud. Por lo tanto, las personas hispanas y de otros grupos marginados cuyos determinantes sociales de la salud han sido definidos por el racismo, corren un alto riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2. 

La idea es sencilla: es poco probable que una persona que trabaje largas horas por poco dinero y que no tenga seguro médico pueda comprar alimentos nutritivos o tenga el tiempo para preparar platos saludables o hacer ejercicio todos los días. Este estilo de vida puede aumentar el riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2. 

La Organización Mundial de la Salud y varios profesionales médicos reconocen que para reducir el riesgo de enfermedades crónicas en las personas que provienen de grupos vulnerables, es necesario ir más allá de la educación preventiva y mejorar sus condiciones socioeconómicas. Por lo tanto, la educación preventiva nunca va a ser suficiente para las personas con prediabetes que no tienen acceso a los recursos que necesitan para reducir su riesgo debido a sus trabajos, seguro médico o situación económica.

El efecto abarcativo de la diabetes tipo 2 en la población hispana

Es natural sentir estrés, temor, ansiedad y hasta depresión al ser diagnosticado con la diabetes tipo 2. Típicamente, estos sentimientos se resuelven con el tiempo y una vez que te vayas adaptando a la idea de tu nuevo estado de salud. Sin embargo, cuando estos sentimientos persisten, es importante que hables con tu médico para que puedas obtener la ayuda que necesitas. 

De todas maneras, a pesar de que pareciera ser sencillo el hablar con un médico sobre cómo se encuentra su estado mental, el hacerlo puede ser un poco complicado para algunos hispanos.

En primer lugar, muchas personas hispanas suelen ser reservadas. El hecho de hablar públicamente acerca de la salud mental se considera tabú. Entre la comunidad hispana, el estigma sobre la salud mental persiste y todavía hay personas que se niegan a buscar ayuda porque no quieren ser vistos como “locos.” 

En segundo lugar, puede ser difícil para algunas personas hispanas encontrar a un profesional de la salud mental por varias razones. Aquí se pueden ver las consecuencias de los determinantes sociales de la salud. Aún estando dispuestos a acudir a un profesional de la salud mental, para muchos hispanos puede ser imposible lograr hacerlo si el médico:

  • No habla español y no tiene un intérprete médico disponible
  • No acepta el plan de seguro médico
  • No tiene empatía cultural

De hecho, las personas hispanas enfrentan barreras de acceso a un buen cuidado médico para la salud mental. A pesar de tener la misma vulnerabilidad a las enfermedades mentales que tiene la población general, las personas hispanas tienen la mitad de las probabilidades de recibir atención médica para la salud mental. 

¿Cuáles pasos puede tomar la comunidad médica?

Es importante que la comunidad médica se gane la confianza de las personas que provienen de grupos vulnerables. También debería reconocer que la discriminación existe y hacer todo lo que esté en su poder para desmantelarla. 

Los médicos pueden eliminar ciertos prejuicios tan sólo con tomarse el tiempo de averiguar cuáles dificultades enfrenta cada uno de sus pacientes debido a: 

  • Los bajos ingresos
  • El horario de trabajo
  • El seguro médico, si lo tienen
  • Qué tan difícil les es atender a las citas médicas, ya sea por falta de tiempo o de dinero

Los médicos también pueden hacer lo siguiente:

  • Identificar y denunciar cualquier caso de discriminación.
  • Hablar sobre el racismo que existe en los sistemas médicos con los estudiantes de medicina para que estos tomen en cuenta su propio comportamiento y en la manera que esto pueda afectar a sus pacientes.
  • Promover la diversidad racial y étnica en las clínicas y los consultorios.
  • Ofrecer intérpretes médicos para las personas que lo necesitan.
  • Preparar los formularios médicos que llenan los pacientes en varios idiomas. 

Que no te de pena de hablar por ti mismo

En ti depende controlar la diabetes y estar pendiente de medir el azúcar, comer alimentos saludables, hacer ejercicio y mantenerte en contacto con tus médicos. Sin embargo, también necesitas el apoyo de los demás. Por eso, considera los siguientes consejos:

  • Encuentra a un médico que tenga aptitud cultural y que se comunique claramente contigo, ya sea en español o por medio de un intérprete, y que siempre te haga sentir cómodo y respetado. 
  • Sé honesto con tu médico si te recomienda algo que no es adecuado para ti, ya sea un medicamento que cuesta mucho dinero o una dieta que no toma en cuenta tu cultura. 
  • Pídele a tu médico que te recomiende a un especialista en educación y cuidado de la diabetes para ti y tu familia. Tus seres queridos deben entender tu diagnóstico lo más posible para que te apoyen lo mejor que puedan y nunca te hagan sentir acomplejado o juzgado por el hecho de estar enfermo. 
  • Si alguien te hace sentir mal, ya sea un ser querido o tu médico, no tengas pena de poner las cosas en claro y decirles que te están faltando el respeto. 

Ver Fuentes

Crédito de la foto:iStock/Getty Images

FUENTES:

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés): Estigma por la diabetes: reconózcalo y redúzcalo. 

Clinical Diabetes: “Diabetes and Depression in the Hispanic/Latino Community [La diabetes y depresión en la comunidad hispana/latina].”

The Commonwealth Fund: “How Discrimination in Health Care Affects Older Americans, and What Health Systems and Providers Can Do [Cómo afecta la discriminación en la atención médica a los estadounidenses mayores de edad, y qué pueden hacer los sistemas y proveedores de salud].”

Jama Network Open: “Patient-Reported Experiences of Discrimination in the US Health Care System [Experiencias de discriminación reportadas por pacientes en el sistema de atención médica de EE. UU.].”

The Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism: “Casting a Health Equity Lens on Endocrinology and Diabetes [Una perspectiva de equidad en salud en la endocrinología y la diabetes].”

National Alliance on Mental Illness (NAMI): “Hispanic/Latinx [Los hispanos/latinos].”

Office of Disease Prevention and Health Promotion: Health.gov: “Social Determinants of Health [Los determinantes sociales de la salud].”

Organización Panamericana de la Salud: “Determinantes sociales de la salud.”